Munich no fue solo el anfitrión de una conferencia de seguridad el sábado, también fue el foco de múltiples manifestaciones contra la guerra.
Alrededor de 10.000 manifestantes se reunieron en la Königsplatz de la ciudad del sur de Alemania, una de las más de una docena de manifestaciones en toda la ciudad que reunieron a manifestantes anti-OTAN, pacifistas y activistas pro-kurdos.
Mientras tanto, en Odeon Plaza, se llevó a cabo una manifestación a favor de Ucrania, pidiendo más ayuda militar y apoyo internacional para el país devastado por la guerra.
Las protestas se producen después de dos días de conversaciones en la Conferencia de Seguridad de Munich, donde los líderes europeos y expertos en seguridad prometieron intensificar el apoyo a Ucrania mientras lucha contra las tropas rusas.
El presidente francés, Emmanuel Macron, dijo que creía que no era el momento adecuado para iniciar conversaciones con Moscú.
“No es el momento del diálogo porque tenemos una Rusia que ha elegido la guerra, que ha optado por intensificar la guerra y que ha optado por llegar a cometer crímenes de guerra y atacar infraestructuras civiles”, dijo.
Si bien insistió en que no quería ver una guerra prolongada, dijo que Francia estaba lista para un “conflicto prolongado”.
Mientras tanto, el canciller Olaf Scholz enfatizó que el apoyo alemán a Kiev estaba “diseñado para durar” e instó a los aliados a acelerar las entregas de los tanques pesados prometidos a Ucrania.